Los espinos son arbustos o como arbolillos espinosos, de
hasta 4 a 5 m de altura con un tronco fino y retorcido, con hojas caducas,
alternas, ovales o subtriangulares, con 3 a 5 lóbulos, a finales de abril
producen las flores en agrupaciones como paraguas, "corimbos" que en
el otoño cada flor da lugar a un fruto carnoso, rojo vivo, piriforme o globoso,
las conocidas "manzanicas de pastor" .
Cada flor se compone de un cáliz verde soldado en olla, una
corola de 5 pétalos blancos orbiculares y libres que caen muy tempranamente y
en su interior llevan numerosos estambres de filamento blanco y antera púrpura
y un ovario con un sólo estilo.
Una porción de pétalo donde se aprecian los vasos conductores
que transportan los nutrientes y que son las finas estrías que se ven a simple
vista.
La superficie de los pétalos aparentemente lisa está
constituida por células epidérmicas convexas o cónicas, muy abultadas y con
paredes fuertemente estriadas para facilitar la escorrentía del agua.
En vista lateral se aprecia mejor la forma apuntada, cónica o
mamelonada de las células que forman la superficie de los pétalos.
El órgano femenino está constituido por un pistilo que
termina en un solo estilo con cabeza o estigma redondeado.
En la superficie del estigma se enganchan los granos de polen
que fecundarán el único óvulo que contiene el ovario en su interior.
Alrededor y sujetos al borde del cáliz presenta numerosos
estambres formados por un filamento blanco que termina en una cabeza o antera púrpura.
Estas anteras están formadas a su vez por dos cavidades o
tecas en cuyo interior se forman los granos de polen.
Estas anteras presentan unas paredes gruesas, rígidas y
curvadas lo que se debe a su constitución por células epidérmicas fuertemente coloreadas
de púrpuras y con paredes provistas de refuerzos curvados a modo de bóvedas lo
que les da consistencia y rigidez.