miércoles, 31 de mayo de 2017

Echium vulgare L. (viborera)

Planta bisanual que forma una gran roseta de hojas basales de la salen uno o varios tallos hojosos densamente cubiertos de pelos duros como los de la borraja. De cada axila de hoja a partir del centro de la planta surge un racimo de flores azuladas terminado en espiral como la cabeza de una víbora a lo que alude su nombre popular.
Toda la planta está recubierta de una epidermis de la que salen gran cantidad de pelos unicelulares muy rígidos y punzantes.
Son pelos punzantes y muy rígidos, unicelulares y de base bulbosa que se articula en la epidermis.

Son pelos muertos de paredes muy gruesas y recubiertas de granulaciones lo que los hace muy rígidos y no solo atrapan humedad ambiental sino que llevan a cabo una acción defensiva contra algunos depredadores. 
Las flores presentan un cáliz dividido en 5 lóbulos muy pelosos como el resto de la planta y una colora tubular abierta en campana de cuyo interior asoman cinco estambres que sobrepasan la corola y un pistilo central.
Aunque la coloración azulada de los pétalos aparece homogénea sin embargo una observación más detallada de una porción nos muestra una distribución del pigmento irregular.
Detalle del borde dentado de la corola y la distribución del pigmento azulado.
El órgano femenino sobresale largamente de la corola debido a un largo filamento o estilo dotado como el resto de las planta de fuertes pelos defensivos.
Termina en la extremidad en una pequeña cabeza, el estigma, donde se enganchan y germinan los granos de polen.
La superficie del estigma presenta una peculiar estructura con células salientes y ensanchadas en la extremidad como diminutas mesas.
En vista lateral vemos que dejan unos huecos donde quedan atrapados los granos de polen.